Lo que no debes hacer al utilizar un aparato de ozono en tu casa

Los ozonificadores domésticos son aparatos especialmente diseñados para facilitarnos al máximo su uso y dejar nuestra casa totalmente desinfectada y sin malos olores. Aunque pueda parecer un artículo de una importante complejidad tecnológica, no significa que a la hora del uso para el usuario este no permita la máxima comodidad.

Como podremos comprobar, nada más recibir nuestro aparato de ozono no necesitamos conocimientos especializados para poder manejarlo ya que vienen con unas instrucciones muy claras y elementales para que funcione correctamente.

La mayoría de modelos vienen con el botón de encendido/apagado, el temporizador y algún otro extra (humidificador, desinfección de agua, etc). Bastará con enchufarlos a la corriente y dejar que actúen para poder disfrutar de un ambiente totalmente desinfectado.

Aún así, hay cosas que, como con cualquier tecnología, deberemos evitar hacer para que el ozonificador funcione correctamente.

¿Qué no debemos hacer al utilizar estos aparatos?

1- No debemos dejar nuestro generador de ozono para casa en un sitio inestable

Al igual que cualquier aparato tecnológico, si se cae puede dañarse. Por lo tanto, si no tenemos una base segura en la que apoyar nuestro aparato y que esté cerca de la corriente, lo mejor es que lo dejemos en el suelo.

2- No debemos dejar la máquina cerca de agua ni de fuego

Algo que parece básico: aunque la máquina de ozono sirva para la desinfección del agua, no se trata de una máquina acuática, por lo tanto si cae dentro de un fregadero o una bañera, lo más probable es que se dañe.

Igual que las fuentes de calor: gracias al ozonificadores podremos desinfectar nuestra cocina y los alimentos, pero corremos un serio riesgo si lo dejamos cerca de un fuego o de la vitrocerámica si estamos cocinando.

3- No debemos olvidarnos de cerrar ventanas y puertas herméticamente

La máquina de ozono purifica dentro de ambientes cerrados, por lo tanto deberemos asegurarnos de que nuestra estancia esté lo más herméticamente cerrada posible para que el gas no se escape y pueda realizar su acción.

Si dejamos las puertas abiertas, el rango de acción se amplía y la máquina no cumplirá su función. Los rangos de acción son los metros que cubre cada aparato: las encontraremos de 25 metros a 100, por lo tanto cuando vayamos a usarla deberemos asegurarnos de que está dentro de su rango.

Si usamos nuestro generador de ozono y a continuación abrimos puertas y ventanas será cómo si no la hubiésemos usado. Ten en cuenta que estas máquinas eliminan los malos olores, por lo tanto el ambiente en nuestra casa olerá igual que si hubiésemos ventilado.

4- No debemos olvidarnos de establecer las horas de funcionamiento

Si nuestra máquina no tiene un temporizador, tendremos que leer en las intrucciones de nuestro modelo cuánto tiempo necesita para desinfectar. Si la apagamos antes, no habrá desinfectado correctamente y si lo hacemos más tarde habremos consumido más energía de la necesaria.

5- No debemos dejar la máquina cerca de animales domésticos

Tanto gatos como perros pueden llegar a tirar nuestro ozonificador y romperlo, por lo tanto, mientras esté funcionando, lo mejor es que les dejemos en otra habitación.

6- No debemos colocar objetos encima de nuestro aparato 

Las máquinas de ozono tienen unas herranuras a través de las cuales sale el ozono al exterior: si las tapamos será mucho más difícil que este se extienda a través de la  habitación.

7- No debemos dentro de la habitación mientras la máquina funciona

Aunque esta acción no entorpezca a nuestra máquina, sí que es recomendable que la dejemos funcionando y nosotros nos encontremos en otro lugar. Una vez pasados los 30-40 minutos podremos volver y apagar el ozonificador.

8-  No debemos usar esta más tiempo del necesario

Los ozonificadores vienen generalmente con un tiempo de uso diario (desde 30 minutos hasta 6 horas), por lo tanto si los usamos fuera de este rango, su eficacia será nula.

Deja un comentario